SieteNotas

Juan Bervejillo, Piercin rock

12/12/2004

ROCK ES, ¿RENTABLE?

Mientras me hacían una nota para una fm de Tacuarembó y Rivera, yo hacía esfuerzos para entender lo que el periodista me quería decir que no era muy claro.

Al fin entendí que quería mi opinión sobre el fenómeno de la cumbia, "este es el público que hace cuatro años escuchaba cumbia" parecía querer decirme.

Por un costado del escenario, desde atrás, podía ver la masa impresionante de gente desparramada sobre el pasto, que se yo, 40 lucas de tipos ahí., una imagen espectacular e impresionante.

Esto es puro Marketing, quise o debí contestarle, pero las palabras no me ayudaron mucho.
La masa es vulnerable y obediente, solo hay que saberla llevar y darle algo a cambio, y, en este caso, el trabajo había estado bien hecho.
En cuanto a la cumbia y las modas, puede ser que haya público compartido pero no mucho, lo que sí hay es cumbia rock y no necesito nombrar a nadie que los ejemplos son bastante exitosos.

En cuanto al público específico del rock, ahí está, lo que prueba que un buen patrocinante echa a rodar lo que toda la voluntad y la calidad artística no consiguen.

BIEN O MAL

Nada es tan bueno o tan malo definitivamente. Fue bueno , buenísimo estar en ese sitio, con sus vistas de praderas y lagos y bosques, la tarde de sol y la posibilidad de socializar, de conversar un poco, lejos de las presiones de los roles que la ciudad nos impone, amansados nuestros espíritus por el paisaje apacible tan típico de nuestro país. Dicen que el hombre para estar sano necesita poder mirar a lo lejos. También es cierto que en la entrada revisaban a cada uno y al que traía alcohol le decían, Flaco/a, tirala o tomátela afuera. Santo remedio, adentro, alcohol ni una gota, excepto el que venía adentro de la panza.

LA MÚSICA

La música también, claro, la música tiene esa propiedad de estimular los espíritus y mejorar los ánimos y, valga le redundancia, animar las reuniones.

Dicho de otra forma, la música es mejor cuando es compartida, o al menos así es como mejor ejerce su magia.

Y por suerte la buena música no faltó, acá se hace buena música más allá de estilos y de mi gusto personal claro, medianamente buena, aceptable y propia es mejor que excelente y ajena, no hubo bandas extranjeras famosas, tampoco nadie las reclamó.
La música amalgamó correctamente a la masa humana como a seres primitivos alrededor de un fuego, la música atrae, a los fanáticos del pogo y a los tranquilos del pasto, sentados donde ni siquiera podían ver el escenario.

LA MASA, EL PÚBLICO

Dos veces me interné en el público, me gusta pasearme entre la masa y sentir esa particular sensación de soledad, particular y paradójica; es en la masa donde uno mejor pasa desapercibido. Sin embargo tuve que, a pesar mío, poner a funcionar mi test de popularidad y darme de narices con mi modesta talla de tipo conocido, recibir el saludo de muchos y el aliento de otros, hasta que al fin, desistiendo de aquella agradable sensación de pasar desapercibido, ficticia, me retiré al backstage donde realmente no era nadie.
Aparte de eso experimenté una sensación de ahogo que nada tiene que ver con lo anterior. Claustrofobia, no puedo entender ni podré a los que se hacinan en las primeras filas del público, sin aire, sin posibilidad de nada más que moverse para donde la marea humana lo decida. Soy de otra época, eso es seguro.

EL SONIDO

El sonido no fue el mejor y hay que decirlo las veces que haga falta.

No alcanza con que suene fuerte, el buen sonido existe y basta ver a cualquier banda grande de un país más grande que el nuestro. En esa materia los responsables vienen robando la plata hace años en Uruguay. Un sonido con buena calidad ( y no una tortura de frecuencias agudas y chirriantes) es posible, yo no sé como hacerlo pero eso no tiene nada que ver.
La música se lo merece, es parte de la madurez que este rock criollo tiene que tener.
Aclaro que la percepción desde el costado del escenario era mucho mejor, pero ¿no era un concierto para mil tipos no?

EL BACKSTAGE

Ese sí que es un mundo fascinante, perverso curioso y gracioso. Jugoso desde el punto de vista de la observación de las conductas humanas. Estuve ahí un poco como intruso, ya que mi banda no fue invitada al show (hace años que no la invitan para estas cosas!!) y yo solo era un invitado de una de las bandas (Graffolitas) que tocaban en el escenario B, o sea el músico menos cotizado del asunto.

Lo más impactante es la indiferencia con que el personal y los músicos de las otras bandas reciben el show (que apunta para el otro lado, es cierto). Es como el adentro y el afuera de una pecera, público y backstage son ánimos tan distintos como si estuvieran a miles de Km. de distancia, o mejor, a muchos años atrás o adelante.

El backstage es un mundo agradable porque es un estado de fantasía, una burbuja de la realidad donde vivís atendido y mimado, y tenés mucha gente a tu servicio. Un brazalete te identifica como parte de esa clase privilegiada y te abre mágicamente las puertas. Estar codo a codo con los artistas que los demás tienen que ver de lejos, custodiados por una valla de hierro que no los deja acercarse a más de tres metros y eso si se tiene la suerte de estar en la asfixiada primera fila, y tener entre ellos y aquellos a una fila helada de sujetos con cara de pocos amigos.

El BS es paradójicamente el mundo donde las estrellas pierden el brillo artificial que les dio una adecuada estrategia de marketing. Hay que decir que la mayoría son buenos tipos, agradables para el trato, aunque vivan, muy a su pesar o no, en la nube de pedos de la fama, que éste es un país chico, pero ser conocido por más gente de la que uno es capaz de recordar es fama acá y en la luna.

PICERNO ROCK

Me tomé la libertad en ocasiones anteriores de nombrar así el evento dadas algunas razones que hacen de este productor el Paco Casal del rock, el padrino que ordena las cosas de tal manera de asegurar cada vez más su absoluto dominio y supremacía comercial en el rock. Las bandas de su staff, Buitres, Trotsky, Hereford, (no cuento a los Graffo por razones antes expuestas), ocupan sitios de privilegio en el cartel, solo compartidos por las bandas que no siendo del grupo Picerno son indiscutiblemente las más taquilleras, o sea NTVG y La Vela.

Mientras que las bandas del grupo de Andrés Rega (otro que fuma abajo del agua), que son La Tabaré y La Trampa, son relegadas a la apertura del show, todos sabemos que es más prestigioso un show con luces que sin ellas.

Así como se destacan unas y se boicotean sutilmente las otras, es solo una de las formas claro.

Esto puede ser sólo especulación pero el ser humano es vanidoso por naturaleza y nadie está a salvo de las vanidades más infantiles aunque lleve cadena de oro y celular gsm o precisamente por eso.

Picerno es tan hábil como silencioso, tal como Paco, y esta habilidad es a fin de cuentas también un arte. Tal como Carbone antes, timonea hoy el negocio del rock.

COMO SE HACE UNA BANDA DE ÉXITO

Una banda de éxito exige sacrificios, tiempo y muchos padrinos en el mundo del espectáculo, de la publicidad y de los medios. ¿Por qué siempre tocan los mismos? Bueno si un mismo individuo representa las bandas y organiza los shows, está todo dicho. Puede una banda llegar a ser masiva por sus propios méritos musicales exclusivamente? mmmm... difícil. ¿Puede una banda de gente clase media llegar a algo? mmmm... En este rock de hoy casi todos son nenes ricos que tuvieron lo necesario para fabricar su propio éxito. Claro, también está la música, existen decenas de bandas desconocidas que hacen música tan buena o mejor que las bandas de éxito pero nunca van a llegar a nada.

Estar en el momento y en el lugar justos y sobre todo con la gente apropiada, eso no se hace, se nace. El show business suele estar en este país de poca gente en pocas manos. Un mundo de clase media, alta.

EL SHOW

El Show fue lo menos importante, en mi opinión, la música funcionó como pretexto para reunirse y ahí está lo bueno del asunto. Más allá de sponsors millonarios, manejos truculentos del programa, cachets ridículos (5000 pesos!!!!!), la fiesta fue una fiesta lo que prueba que la voluntad de la gente puede más a veces que los planes que se hagan para ella desde misteriosos sitios.

Las mismas bandas, sin el apoyo adecuado de una campaña publicitaria millonaria, no reúnen la gente que se reunió allí.

2 ESCENARIOS DOS

Uno imponente e intimidante, el otro, por comparación, discreto. En uno todas las luces, las bandas más caras, los shows más largos, el sonido mejor, el volumen más fuerte. En el otro bien pero de todo menos. Piensen de esta manera y es perfecto: un show sin interrupciones, mientras las bandas importantes arman su set, en un tablado ubicado a treinta metros del escenario mayor, otras bandas en vías de desarrollo entretienen como pueden al público para que la espera sea leve. ¿Suena lógico no?

PIERCIN ROCK

Lo intenté y no lo logré, había decidido dar el paso y engancharme uno de esos en donde fuera para verme más en onda pero no hubo caso. ¿Para qué mierda le ponen Piercin Rock al Festival si no encontré un puto puesto donde colocarme uno?
La gente está crazy.

Haciendo Ruido Nº8 www.haciendoruido.com

Juan Bervejillo

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