Virginia Martínez y Patricia Kramer en El Taller
25/11/2005
Con sentido personal
“Dos voces femeninas impresionantes”, anunciaba el comunicado oficial. Y estaba en lo cierto, no fue una mera estrategia publicitaria. El viernes 25 por la noche en El Taller, Virginia Martínez y Patricia Kramer lograron lo que sólo dos verdaderas artistas pueden lograr, captar la atención de todo el público y hacerle sentir cada canción.
El ambiente en el que se desarrolló el espectáculo fue el complemento ideal. Sólo unos focos de tenue luz azul y naranja iluminaban el escenario, mientras que los alrededores del lugar permanecían apenas visibles por la luz de las velas. La cerveza y la pizza fue el menú de casi todos. Se respiraba un aire de sencillez y familiaridad.
La primera en salir a escena fue Virginia junto al guitarrista Martín Sena. Le cantó al amor, a historias cotidianas y hasta a algunos lugares del sur de Estados Unidos. Su repertorio, a diferencia del de Patricia, fue en inglés y transitó por los caminos del blues y el jazz; géneros musicales prácticamente no tratados por artistas uruguayos pero que con Virginia intentan lograr su espacio en el ámbito de la música nacional
En una entrevista que le concedió a deluruguay.net, anteriormente, Virginia dijo que por el momento no había compuesto ninguna canción en esos géneros por considerar que otros, antes que ella, habían dejado un legado de temas muy bellos que valía la pena retomar. Se refería a Gershwin, Billie Holiday, Louis Armstrong, Cole Porter entre otros. También afirmó que no creía que sus composiciones llegaran a superar a las de esos autores.
Lo que destaca en Virginia es la calidad y el manejo que tiene de su voz e interpretación. Demostró ser capaz de transitar con facilidad por la escala de los graves y los agudos, los sonidos fuertes y profundos que cubrían todo el lugar y los más suaves que llegaban, por momentos, a convertirse en susurros.
Sin duda, esta intérprete, como buena profesora de inglés, entiende los mensajes de sus melodías y esa noche también los hizo entendibles para el público, no sólo por su excelente dicción sino también por su grado de compenetración con cada una de ellas y por su gran capacidad comunicativa. La guitarra de Sena fue su gran aliada. Entre las dos ofrecieron al público un show con mucha alma.
A los quince minutos, el escenario se vistió de otro color. Apareció Patricia con su amiga casi inseparable, la guitarra. “Estoy nerviosa, pero a la vez contenta”, dijo después de cantar la primera canción. “Es la primera vez que me presento así, sola, ante tanta gente y en parte me animo gracias a mis compañeros de la banda”. La acompañaron Sebastián Pereira en batería y percusión, Andrés Puppo en el bajo, Mariana Vázquez en guitarra, armónica y coros, y también contó con la participación especial de Alejandro Tuana en guitarra.
De todas maneras, los nervios no le impidieron disfrutar de ese momento y así fue como Patricia ofreció un espectáculo espontáneo, original y cálido. La mayoría de los temas que interpretó son de su autoría y fusionan el pop y el rock.
Aunque era su primera presentación como cantante solista, ya hace un tiempo que Patricia está vinculada al mundo de la música. Desde hace tres años aproximadamente, viene haciendo un espectáculo junto a Ana Prada, cantante de La Otra y corista de Rada. En esas presentaciones en boliches, las dos empezaron cantando temas ya conocidos pero intentando mostrar un ángulo diferente en lo musical y luego, paulatinamente, fueron incluyendo temas propios.
El dominio que demostró tener Patricia de su voz y guitarra, relegaron sus nervios a un segundo plano. Ese talento lo supo aprovechar al máximo, le permitió hacer aventurados juegos con el canto y los acordes y trasmitir al público diferentes sensaciones.
Patricia cantó más que al amor, a las reacciones que provoca, a veces de ilusión, de felicidad, de lo ideal o imaginado y otras veces de tristeza, impotencia y rabia.
Según dijo hace unos meses en una entrevista que le realizó Luis Morales para www.vocesfa.com.uy, los temas de su repertorio, al igual que la química, ciencia que está estudiando en la facultad, buscan ir a la esencia. Están relacionados con su historia personal, por eso al principio le fue difícil hacerlos públicos pero de a poco se animó y hoy son las letras que más le gusta cantar.
Seguramente fue la combinación entre su excelente interpretación, la potencia y riqueza musical que aportó el resto de la banda y los temas de las canciones que apelaban a sentimientos muy humanos, lo que hizo que el público le pidiera a Patricia que cantara “una más” antes de despedirse.
Aunque la vocalista dijo que “hacer bis iba contra sus principios” y dudó un poco sobre el tema que podría interpretar, terminó cediendo a un pedido musical que le hizo Ana Prada que, esta vez, la acompañaba como público. También se encontraba como espectadora la cantante Samantha Navarro de La Dulce.
Para quienes se perdieron estos toques o para quienes se quedaron con ganas de escuchar más, se recomienda que estén atentos a los próximos. Virginia se presentará el 8 de diciembre a las 22hs en el teatro del Centro con All of me, un recital de clásicos del jazz, y Patricia lo estará haciendo el 13 de diciembre en la Feria del libro a las 22 hs. ¡Qué disfruten de los espectáculos!
Valeria Francia
30/9/2006 | marianella estuve ahi y fue emocionante. Virginia es una cantante de una sensibilidad y calidad alucinante. Se la recomiendo a todo el mundo. |
12/12/2005 | marina BUENO, GENTE, SIMPLEMENTE VOY A DECIR UNAS PALABRAS SOBRE LO DE VIRGINIA MARTINEZ: INCREIBLE! EL ESPECTACULO EN EL TALLER ME DEJO CON GANAS DE VER MAS, Y LES HICE CASO, Y FUI AL SIGUIENTE ESPECTACULO DE VIRGINIA EN EL TEATRO DEL CENTRO, Y LO QUE VI FUE TODAVIA MEJOR, YA QUE ALLI, VIRGINIA BRINDO UN RECITAL MAS EXTENSO Y ABARCO MAS VARIANTE DE TEMAS, HIZO BOSSA, JAZZ, BLUES... LO UNICO QUE PUEDO DECIR Y CON LA GENTE QUE ESTABA COINCIDIAMOS, ES QUE ESTA ARTISTA SE MERECE UN LUGAR MUCHO MAS DESTACADO DEL QUE TIENE, PERO LES ASEGURO QUE EL QUE LA ESCUCHA INTERPRETAR UN "SUMMERTIME", POR NOMBRAR UNO SOLO, NO SE OLVIDA MAS DE ELLA. ADEMAS, SU SIMPATIA, RESPETO POR EL PUBLICO Y EXCELENCIA EN EL MANEJO DE SU VOZ, NOS HACE DUDAR DE DONDE ESTAMOS. SIN DUDA, UNA SORPRESA PARA MI, Y DOY FE QUE PARA TODOS LOS QUE ESTABAMOS. SIMPLEMENTE: UN NIVEL DE CANTANTE MUY POCAS VECES VISTO POR ESTOS LADOS... |