Laura Canoura, juguemos mientras el lobo no está
1/3/2006
El 22 de agosto, en “La casa de los 7 vientos”, Laura Canoura se atrevió a “jugar” con su equipo mientras el lobo dormía… “Esta es mi oficina”, dice Canoura mientras entra al Café Bacacay sonriendo y pide un cortado que va a revolver durante casi toda la entrevista. Si quieren conocer más de esta artista uruguaya y de su nuevo disco en vivo “ESENCIA/DOS”, les recomiendo esta nota en exclusiva.
“EN ESTE DISCO HAY MÁS DIVERSIÓN, MÁS JUEGO, MÁS LIBERTAD…”.
¿Qué cosas cambiaron de “Rumbo” a esta parte?
Crecí mucho como artista. Considero que soy mejor cantante y aprendí a manejar mi instrumento. Asimismo, me crucé con gente muy talentosa que me ayudó bastante. En “Rumbo” éramos todos muy amigos pero cuando empecé como solista aprendí a vincularme con buenos músicos.
¿Hoy cómo surge la idea de grabar este nuevo disco en vivo?
Grabar en vivo es un corte vertical de un momento, de un grupo de artistas que no se repite al día siguiente. No había ningún plan, no pensaba sacar un disco este año, pero hicimos este espectáculo en vivo en “La casa de los 7 vientos” y funcionó tan bien que le propuse al sello discográfico grabar y ver… yo quería intentarlo. La decisión de sacar el disco la tomamos en una semana. Ese día llovía, no estaba muy ensayado, queríamos que fuera espontáneo. Quedamos muy felices. El resultado global quedó tal como lo pensamos el primer día: lo que se ve y se escucha es lo que nosotros queríamos que se percibiera. Lo conversamos con el sonidista, con el diseñador y con el fotógrafo. Buscamos vender lo que tiene adentro: un espectáculo en vivo en un lugar pequeño. Este disco era para jugar: “aprovechemos a jugar ahora que podemos porque el lobo no está”… (explica sonriendo).
¿Por qué le pusiste “Esencia/Dos”?
En primer lugar, sigue la misma ruta que “Esencia”, pero nunca pensé en sacar dos. Lo pusimos con letra (DOS) adrede porque es más “esenciados” que “esencia dos”. El disco tiene un espíritu de juego, de búsqueda, de diversión entre Jorge Nocetti, Sebastián Larrosa y yo. “Esencia/Dos” es como un juego de palabras. Si bien este disco entra en el formato de “Esencia”, porque es un disco minimalista, enfocado a la parte sensible de los temas, nos gustaba el juego de palabras con “esenciados” como un adjetivo. Cada vez que hacemos un tema, en un clima especial, decimos que nos quedó como “esenciado”…
¿Qué tiene de especial “La Casa de los 7 vientos”?
Me gustan mucho los lugares pequeños, me gusta tener a la gente cerca, ver como reaccionan, verles la cara, jugar con los silencios, con las pausas. Me llamaron unos amigos de El Taller, que es un grupo de gente que le encanta hacer música, y me ofrecieron cantar en “La casa de los 7 vientos”, que además queda a una cuadra de mi casa… por tanto ya no tenía excusas… (confiesa).
¿Qué buscás con “Esencia/Dos”?
No hay un objetivo concreto. Busco hacer las cosas lo más auténticamente posible con lo que voy sintiendo en ese momento. Este disco muestra lo que soy. Estamos muy contentos hasta con los errores que se sienten en el disco, porque hablan de nosotros como músicos y como personas.
Me gustaría formar parte de la banda sonora de la gente, formar parte de un momento del día de alguien, ya con eso me conformo… Que la gente lo tenga en su casa y lo escuche mientras se saca la corbata y baja las revoluciones…
¿Qué diferencias existen entre este disco y “Esencia”?
Hay diferencias abismales. El disco “Esencia” cuenta con versiones muy elaboradas, con mucho arreglo y ensayo y eso hacía que me aislara de la gente. En este disco hay mucha más comunicación, hay más diversión, más juego, más libertad. Me gusta el sonido muchísimo. Es un disco super digno que puede estar en cualquier batea de cualquier disquería del mundo.
“QUIERO APRENDER A ESCRIBIR DESDE ALGUIEN QUE NO SOY YO”
En "Esencia/Dos" interpretás clásicos y un repertorio de temas propios y ajenos, ¿qué te llevó a elegir esos cantautores y no otros?
En general los elegí por las melodías. “Cinema Paradiso”, por ejemplo, es una deuda que tengo conmigo desde que descubrí que esa música tenía una letra. Yo estaba ensayando con Sebastián (Larrosa) y una semana antes de tocar a mí se me ocurrió meter unos tangos porque me gusta mucho cantarlos. Toda mi vida canté tangos a nivel doméstico primero y tengo la influencia de mis viejos que son muy cantores. Los tangos los elegí por el universo melódico que tienen, Julio Sosa es uno de mis favoritos y las letras son muy fuertes. Siento que las letras de los tangos, si bien tienen mucho que ver con el Río de la Plata, no son para nosotros en este siglo XXI; tienen una carga emocional y melódica muy fuerte. Por ejemplo, la letra “La Casita de mis viejos”, que elegí para el disco, cuenta cosas que hoy en día no suceden, muestra realidades distintas.
La mayoría de los temas hablan de amor, ¿por qué?
Es un sentimiento básico, es altamente inspirador. Yo cuando estoy enamorada escribo más.
¿En qué te inspirás para hacer las letras?
Depende, hay épocas en las que uno está más autobiográfico que otras; ahora estoy copada con escribir desde un personaje, con aprender a escribir desde alguien que no sos vos. De esta forma se te amplía el universo. Yo soy de la escuela de Chico Buarque, que logra salirse de su personaje para escribir desde otra óptica. Es super gratificante…
¿Qué grupos te inspiran a la hora de escribir?
Me gusta Caetano Veloso, Chico Buarque, Eric Clapton, Mercedes Sosa, León Gieco… picoteo mucho, escucho de todo… Cuarteto de Nos, No te va a gustar, La Otra, entre otros.
¿La primera letra de este disco la escribiste desde alguna experiencia vivida?
Es una canción de bienvenida, es nostálgica, melancólica pero esperanzadora. Me gusta pila y no la escribí desde una autoexperiencia, la compuse deseando que me pasara eso algún día…
¿Por qué elegiste “Naif”?
Es bien ingenua, juguetona, me gusta cantar en versiones que permitan que la letra se destaque.
Hablemos de “Los hijos de Gardel”…
En el ´94 me fui a un festival en España y en el avión se me vino la frase “Los hijos de Gardel”. Lo anoté y cuando volví la boceté. Me llevó mucho tiempo hacerla y quedó en un cajón hasta el 2000. Ese año, AGADU hizo un concurso de tangos y allí la presenté y gané. Es una música super tradicional y sin vueltas. Sin embargo, me cuesta mucho cantarla porque la gente se emociona bastante…
¿Qué te produce la letra “Tu”?
Es uno de los primeros tangos que grabé en mi vida, es una de las pocas canciones que sobrevive a los repertorios. Además, cada vez que lo hacemos terminamos enamorados del tema, como si lo hubiéramos hecho por primera vez y la venimos haciendo hace años. En este espectáculo, Jorge Nocetti la tocó con una guitarra eléctrica y terminó siendo la mejor versión que hicimos hasta ahora del tema.
¿Quién es “La Señora EME”?
Habla de mi mamá, “La Señora EME” es mi vieja…
¿Por qué “3 de Agosto”?
Es una música de Hugo Fatorusso, es super romántica. Hugo le puso “3 de Agosto” porque fue el día que la compuso.
¿Qué pasaba por tu mente en el momento que hacías “Casandra”?
En una época estuve muy interesada en la mitología griega, me fascinaba ver como un mito se puede implantar. Me inspiré en el mito de Casandra: era aquel que contaba que Apolo se enamoraba de ella y como ella no le correspondía, Apolo le mandaba la maldición de que nadie le iba a creer nada… En el espectáculo, Jorge se lució mucho con la guitarra y Sebastián al final se metió y eso me gustó.
¿Qué es la “Realidad virtual” para ti?
Es una canción que compuse en Chile en la casa de unos amigos. Era mi primer viaje importante con el sello discográfico, además iba a grabar un disco. En ese tiempo escuché el disco de Fito Páez “El amor después del amor” y me morí… lloré un buen rato, me puse a escribir y compuse la mitad de la canción. Además, estaba teniendo un amor muy intenso por mail en esa época, nos veíamos poco y me preguntaba si habría algo más que la realidad virtual en esa situación amorosa…
¿Qué sentís cuando cantás “Nada”?
Es uno de los tangos más lindos que hay, tiene una melodía fuertísima, una letra poderosa.
¿Alfredo Zitarrosa es un referente?
Para mi Zitarrosa es un gran músico, sobretodo por su nivel poético. En general, se lo conoce por la importancia de su voz, la gente lo asocia más como intérprete que como compositor. “Solos y Juntos” tiene una letra maravillosa que se afirma en la palabra, tiene pasajes increíbles. Es bien juguetona y nos encanta hacerla en vivo.
¿Cómo nace la idea de cantar “Chamuyo Cafiolo”?
Rinde muy bien en vivo porque hay mucho acting. Yo me encargo de torturarlo a Sebastián Larrosa bastante… Mauricio Ubal modificó la letra para que yo la cante, porque es más divertido que lo cante una mujer que un hombre. Mujeres “fiolas” nunca escuché en ningún tango… (se ríe).
¿Cómo fue el proceso de creación de la tapa del disco?
La tapa quiere comunicar “el vivo”, yo quería fotos que respetaran el aire del espectáculo, que se viera el piano, gente, la copa de vino, la mesa, ese es el clima del disco. Lo que me parece novedoso es que figuren las canciones en la tapa, ya que no es habitual en los discos. La idea era que la gente que no estuvo ahí sintiera que igual estuvo y la que fue que reviviera el espectáculo.
¿En total cuánto tiempo te llevó hacer el disco?
Ensayamos durante quince días. La mezcla nos llevó una semana y después nos fuimos con Jorge a Europa de gira. Cuando volvimos supervisé el arte, el sonido y en diez días estaba en la calle.
“ME PROPONGO HACER COSAS QUE ME DESAFÍEN”
No es fácil tener más de veinte años de trayectoria y seguir teniendo vigencia…
La permanencia no es algo que me proponga, es una consecuencia. Me propongo hacer cosas que me desafíen a mi misma, que me diviertan, que me provoque una atrás de la otra. Estoy saboreando este disco y ya pienso en el que viene. Adrenalina pura, eso es lo que me gusta.
¿Creés que tu público ha ido cambiando?
Sí, hay un publico fiel pero me sorprende los jóvenes que se enganchan por las letras femeninas, por los jingles, me gusta renovar el publico.
¿Te sentís reconocida, apoyada por tu país?
Sí, y me apoyaron mucho para poder irme de gira.
¿Tu formación como actriz te ayudó en el escenario?
Sí, mucho. Estudié teatro porque la facultad de Arquitectura cerró en la dictadura. Omar Varela me ayudó mucho y la Piaf también. Crecer te desinhibe y ver otras cosas aquí y en el mundo también.
Te fuiste de gira por Europa, ¿pensás volver?
Volvemos en julio del año que viene por un proyecto interesante.
Ya que tuviste la oportunidad de viajar por el mundo, ¿cómo ves a nuestro país hoy (económica, cultural y musicalmente)?
Económicamente estamos saliendo de un agujero negro re tinto, sin embargo soy esperanzada y creo que estamos entrando en una etapa distinta…
A nivel cultural somos un semillero maravilloso, hay artistas talentosos en todos los géneros, hay músicos uruguayos desparramados por todo el mundo, pero somos muy malos vendedores, el rubro managment es inexistente, no hay managers, representantes buenos y eso es una carencia, es agotador. Además, la plaza es muy chiquita, si no salís para afuera es difícil mantenerte produciendo sólo para Uruguay.
Estás pensando en sacar otro disco…
Sí, ya tengo todo el material… hay que darle un tiempo a este pobrecito para que respire un poco. El nuevo disco va a ser de autor, casi todos los temas son míos. Pero por ahora quiero respetar una base sonora de cuarteto como hicimos en “Bolero”: batería, piano acústico, guitarra, contrabajo… proyectos me sobran…
¿Siempre tuviste el proyecto de ser cantante?
No, de chica soñaba con ser maestra, azafata. Mi familia es muy cantora, pienso que pasé de un estadio al otro sin darme cuenta…
Federica Inthamoussu Riet