Malena Morgan, furia sonora
18/11/2001
Herman Klang y Malena Morgan acaban de editar su primer y quizás único disco llamado ¿Cómo?; disco estridente, rockero, cargado de rebeldía, que representa siete años de idas y venidas, una constante de la banda nacida en 1994.
Si bien empezó siendo una banda en formato trío, el tiempo determinó no sólo su disgregación sino que la responsabilidad absoluta recayera en uno de sus integrantes, Herman Klang: “Ninguno quedó en la banda. Me parece que no me bancaron la cabeza. La cosa se fue como formando alrededor de mi persona. Yo empecé a hacer todo y llegó un punto que... digo, hoy por hoy no quiero seguir tocando con la banda. No quiero porque no me da la energía, tampoco me da el presupuesto: armar un recital, sonido, todo...”.
- De todas formas, el disco lo grabaste con Malena Morgan.
- El disco es de Malena Morgan. El disco representa todo el laburo... en realidad representa una transición desde el trabajo colectivo hasta el laburo mío, solo, ¿entendés? O sea, los temas más nuevos los hice yo solo y los temas más viejos los hicimos en conjunto con otra gente.
- ¿Pero al estudio entró toda esa gente?
- Bueno, hay temas que los hice con el Príncipe que sí están grabados en la voz por él. Después hay temas que hicimos con el Palmera (Gindel), que no grabó en el disco porque se fue del grupo y porque no estaba muy dispuesto a laburar, lo cual es perfectamente comprensible. Y después otros temas también con Sebastián Laurito -el violero de Malena Morgan, el primero-, que también grabó en el disco. También hay otros invitados que no tienen nada que ver con la banda. La formación de la banda en el momento de grabarse era Diego Bertaburu en batería, Maia Castro en la voz, Juan Carlos Graña en el bajo y, bueno, el guitarrista era Federico Navarro, pero estuvo muy poco tiempo en la banda. En realidad la banda base era sin guitarrista. El guitarrista fue variando todo el tiempo y salvo Sebastián al principio, nunca hubo quien se quedara....
- Entonces el disco se concreta diríamos en base a tu esfuerzo personal.
- No tan así... los demás pusieron lo suyo. Pero sí, yo fui el que armó todo, estuve en todas las sesiones, estuve en toda la mezcla... yo soy el único que estuvo todo el tiempo... hice los arreglos.
- Lo proyectaste y lo encaminaste.
- Sí, sí, más bien.
Malena Morgan nació en 1994. Obtuvo premios en el Festival de la Canción de Montevideo (incluyendo dos de sus temas en el CD “Ahora o nunca”, que recogía lo más destacado del certamen) y en el Festival de Música Instrumental de Montevideo (grabando el tema “Azucena” en el disco “Ganadores del Segundo Festival de Música Instrumental de Montevideo). Participó también con dos temas (“I am an uruguayo” y “Patiushka”) en el CD “La música de los barrios”. “¿Cómo?”, que vendría a ser su primer disco oficial, fue grabado en El Estudio entre marzo y diciembre de 1999. Junto a la formación oficial, participaron como invitados: Gustavo “Príncipe”, Nicolás Ibarburu, Francisco Fattoruso, Roberto “Palito” Elizalde, Vida Bastos, Nicolás Mora, Elena “Paquita” Mañosa y el comentarista de fútbol Raúl Barizzoni.
- Además de ser un balance de la trayectoria de la banda, ¿de qué habla "¿Cómo?"?
- Mirá, el disco no tiene una unidad. Reconozco que no tiene una unidad. Yo lo considero una especie de tesis de recibido, una cosa así.
- ¿Podemos hablar de un estilo musical definido?
- Y no, este disco es estridente y rockero porque yo qué sé... una especie de rebeldía adolescente, que en realidad ya no me siento representado por ella, lo cual no implica que el próximo no sea un noventa por ciento milonga o tango. Como que la estética y el estilo son cosas independientes. Mi aspiración es poder expresarme a través de cualquier estilo, el que se me ocurra, cosa que obviamente todavía no puedo; pero mi aspiración es esa. Me parece que los artistas optan. Yo pienso que los hombres más grandes de la música uruguaya, para mí ¿no?, como Jaime (Roos), Maslíah, Cabrera, Rada... todos esos tipos hacen una milonga, hacen rock, hacen lo que sea y, más allá del estilo, siempre son ellos. Como que la estética de los tipos está tan definida que está siempre el estilo. Y en este caso, este disco, en lo único que se puede definir como un estilo que lo une es esa estridencia, aunque hay temas que son tranquilos también. Pero como hay violas distorsionadas hay una especie de furia ahí.
- Es el toquecito de Malena Morgan.
- Claro, uno de los ingredientes del toquecito de Malena Morgan es estridencia y como una especie de furia sonora, una especie de rebeldía que no sé de dónde viene. En cierta forma es medio adolescente. Yo hoy por hoy no siento la necesidad de hacer eso. Igual me encanta, pero no es tan indispensable.
- No pensás seguir componiendo en esa línea.
- No lo sé en realidad. No necesariamente, capaz que sí; o sea, la estridencia y la pesadez no es un requisito indispensable para sentir que algo está logrado ni mucho menos. No es ni para sentir que algo tiene energía ni que es pesado ni nada. O sea, por alguna razón mi cabeza antes tenía la idea de que para terminar cerrando una cosa con energía -como le quieras llamar, que estaba en la composición-, como que tenía que haber una guitarra distorsionada...
- Volumen alto...
- Volumen alto, no sé qué... Antes era así, ahora no. Si es necesario sí. Pero eso tiene sus desventajas. Una de ellas es la infraestructura que se necesita para presentarse. Ir a un lugar muy especial, que admita ese tipo de volumen. Se requiere un público también que esté acostumbrado, si no se siente incómodo. Se necesita una banda, se necesita un ensayo... yo qué sé, se necesitan muchas cosas, y al final termina siendo una pesa en las bolas para caminar ¿entendés? Ahora eso no es necesario. Igual, el disco esta ahí, es eso... capaz que hago mal, debería darle para adelante como hace la gente...
- Hoy dijiste algo así como que lo hicieron para sentirse artistas. ¿Eso qué quiere decir?
- ¿Qué quiere decir?... No, no, que bueno, que todo un pensamiento musical de un momento está plasmado en algo ¿entendés?, y eso cierra una etapa en cierta forma. Y yo no sé si es sentirse artista, simplemente, ¿cómo te puedo explicar?: una tesis es algo que se hace más que nada para aprender ¿no?, para aprender algo, cómo se hace... Con este disco aprendí cómo se hace un disco básicamente, lo cual va a hacer que el próximo me salga mejor. Básicamente yo considero este disco como un disco que me sirvió para aprender cómo se hace. Pero no me siento representado por él en este momento...
Pero bueno, si yo empiezo a tocar el año que viene, a la gente que le guste lo que yo haga, lo único que voy a tener para mostrarle es el laburo que hice con la banda Malena Morgan. El laburo que hicimos con otra gente que yo terminé llevando adelante, porque en la etapa que se hizo el disco, el que estaba más por dentro era yo. Y es lo único que voy a tener para mostrar.
- ¿Por eso de no sentirte representado las pocas ganas de promocionarlo?
- No es eso, no es eso. Yo tengo ganas. Lo que pasa es que a mí me interesa más estar tocando y hacer canciones. Me hace más feliz hacer una canción y que quede bien y tenerla para tocar en vivo, que escuchar el disco en la radio. Prefiero invertir el tiempo en hacer otra canción que llamar gente para decirle: “Bo, pasá el tema”. Digo, si igual yo no voy a terminar nunca de componer. Yo voy a tener ochenta años y voy a seguir componiendo. Este disco va a estar ahí, va a formar parte de una carrera artística, mala, buena, regular, con público, tres tipos, eso no me importa.
- O sea que no te cambiaría el hecho de ser escuchado por más gente.
- Supongo que sí, que cambiaría, pero no es el objetivo ¿entendés? El objetivo es la música. Yo hago una canción que a mí me parece que está redonda y que me parece que lo que me propuse lo logré; eso ya es una gran satisfacción y esa es la satisfacción que yo busco. Y después la tocaré en vivo y veré qué pasa. Pero estar todo el rato buscando la manera de que te conozcan por medio de llamadas telefónicas...
- De eso debería encargarse otra persona ¿no?
- Completamente. De todos modos en otros lugares también pasa. Cualquiera que empiece de entrada no tiene la infraestructura. La infraestructura se va formando si vos seducís al público. Y bueno, parte de ese público va a querer ser tan partícipe del proyecto que los que quieran producir van a producir ¿no? Yo creo que entra a formar naturalmente una infraestructura. Cosa que no ha pasado con Malena Morgan, entre otras cosas porque tocamos muy poco, porque cada toque es un parto ¿viste?: conseguir el lugar, ensayar, hacer la publicidad para que vaya gente... es terrible. Yo no sé hacer ese laburo. Y no sé, para que funcione tienen que ser todos los miembros de la banda laburando para eso, y no sucede. O sea, Malena Morgan es un proyecto inviable. En este momento lo considero así, lo cual no quita que se haga un recital de Malena Morgan en algún momento para presentar el disco. Pero mi prioridad es armar algo sencillo, austero, que se pueda presentar en cualquier lado sin mayores inconvenientes, sin que tenga que haber veinte tipos laburando.
- ¿Se va a seguir llamando Herman Klang y Malena Morgan?
- No, no, mirá, el CD se llama así porque es la realidad. Básicamente se llama así porque si la banda no sigue o sigue en forma esporádica... bueno, primero que si una banda hace actuaciones esporádicas es como que no existiera, pero si el nombre de un tipo hace actuaciones igual existe, porque el tipo está, de última la gente te pregunta: “Bo, ¿cuándo vas a tocar?”.
- Hay un interés.
- No es que haya un interés, pero una banda que toque cada dos años... con un solista no pasa eso. Y después, si la banda no sigue y yo sigo haciendo espectáculos en forma más austera, no está bueno que quede divorciado el disco de eso. Que haya un disco que no tenga alguien que... o sea, un espectáculo en vivo que lo represente y a su vez que el espectáculo en vivo que yo esté haciendo no esté representado por el disco, sería completamente impráctico y haría que ese laburo fuera al pedo en un gran porcentaje. Pero por otra parte este disco no es un disco solista.
Carlos Bassi