Aprovechando el VIII aniversario de la Sala Zitarrosa, Jorge Alastra tuvo la iniciativa de homenajear a un gran músico nacional: Fernando Cabrera. El homenaje fue conformado por 15 de sus canciones que fueron versionadas por varios de sus colegas, reconocidos músicos en el ambiente nacional e internacional.

“Una de Cabrera” además de ser el nombre del espectáculo presentado, se refiere también al nombre del disco en donde los artistas ya grabaron sus versiones de los temas de Cabrera; el plan era realizar la presentación junto a la salida del álbum, pero lamentablemente la obra está retenida en la aduana. El trabajo discográfico fue editado por el sello independiente Saddhu Records y se espera arribe desde la aduana directo a las disquerías locales próximamente.

La selección de temas de Cabrera elegidos para el disco homenaje y para la presentación en vivo, cubrieron sus más características composiciones y cada uno de los músicos encargados de interpretarlas le sumaron un poco de su esencia individual en la interpretación.

Jorge Galemire (ex integrante de El Syndikato y uno de los fundadores de Canciones para no dormir la siesta) fue quien inauguró el homenaje con “Agua”, tema que pertenece a El tiempo está depués.

Luego, la hija de Fernando, Virginia Cabrera, acompañó a Esteban Klisich y Fabián Sánchez en “Madrina”, mientras su padre miraba todo muy atento desde la primera fila de la Sala.

Pasaron además: José Soba con “Pandemonios”, Hugo Rocca con “El posible López”, Andrés Wels con “La garra del corazón”, Silvana Marrero con “Méritos y merecimientos”, “El tiempo está después” con Carlos Darakjian y Fernando Ulivi con “Iluminada”.

Una de las destacadas presentaciones estuvo a cargo de Walter Bordoni, que dejó su versión de “Tuviste”, del disco El tiempo en la cara. Lo hizo sólo arriba del escenario y se valió de sus peculiares expresiones para sacarle el mejor jugo al tema.

Popo Romano hizo de las suyas con uno de sus miles de bajos alrededor del tema Virginia, generando una ovación en el público. Antes de su presentación, comentó que era una ocasión muy especial ya que por un lado se estaba reconociendo el trabajo de un artista representativo de la música popular uruguaya y por otro se reunieron varios colegas en un lugar que también homenajea a un representativo músico uruguayo.

Hizo referencia a la locura que se generó en los camarines por todos los músicos que estaban allí. Realmente fue así, en los momentos de silencio, charlas y risas se escuchaban desde abajo del escenario.

La argentina Liliana Herrero tampoco faltó a la cita, como reconocida admiradora de Cabrera y se presentó ante una Zitarrosa que la recibió y despidió de pie. “La casa de al lado” fue uno de los dos temas que interpretó, agregando una emoción más a la noche y sacando lágrimas de varios de los espectadores.

Jorge Alastra se encargó con su guitarra de la versión “Imposibles”, que contó con la participación del propio homenajeado que lo acompañó a modo de agradecimiento por la iniciativa.

El encargado del cierre fue nada más y nada menos que Gastón Ciarlo “Dino”. Su interpretación de “Estás acabado, Joe” fue impecable y el homenaje terminó con una energía enorme que dejó al público emocionado y deseando que la aduana libere la edición de Una de Cabrera.

Gisselle Noroña