“Es un disco muy variado a nivel rítmico y tímbrico ya que viaja entre diferentes estilos: candombe, samba, bossa nova, pop, jazz… creo que eso lo convierte en un trabajo sin las fronteras de las etiquetas”.
¿Por qué Fronteras? ¿Tiene una explicación?
Todo partió de una serie de conciertos que hicimos con mi amigo y reconocido cantautor y poeta español Pablo Guerrero, yo le propuse el nombre Fronteras para hacer como una división imaginaria entre la canción y la poesía. Aunque muchas veces se asocian por la etiqueta cantautor, son dos lenguajes distintos aunque hermanados por el ritmo de los versos. Pero después más adelante ese concepto se actualizó por todo lo que pasó en Cataluña, inclusive el propio Brexit en el Reino Unido; hace poco también fue terrible lo que paso con un chico africano en mi barrio Lavapiés de Madrid por culpa del racismo indiscriminado. Seguimos dividiéndonos de muchas formas, tanto de forma ideológica y con la política como trampolín para alejarnos mutuamente hasta del afecto más básico y de la empatía diaria.
¿Qué diferencias y qué similitudes podemos encontrar entre este disco y el anterior?
Tienen un mismo fondo acústico que es por donde voy transitando actualmente, en registrar las canciones con la mayor aproximación a la cercanía de una guitarra y una voz tanto en el salón de una casa como en un concierto acústico.
Variadas Emociones, el álbum anterior, es una especie de compilado de emociones diversas tanto para homenajear a mis influencias artísticas más directas como Luis Alberto Spinetta, Gustavo Pena “El Príncipe”, Gustavo Cerati y, por otro lado, el compartir música y letra con artistas nacionales que aprecio y admiro como Pippo Spera y Jorge Luis Flaco Barral.
Fronteras, por otro lado, es un álbum crudo en directo que se grabó en formato analógico en el mítico estudio Rock & Soul en Malasaña, Madrid, con el ingeniero Ricardo Escassi del Castillo (Xoel López, Stevie Wonder, Tequila, Glutamato Ye-Yé, Juan Perro entre otros). El formato del mismo es solo voz y guitarra, junto a la percusión de Pedro Supatto (Concha Buika, Batida Sonora, Jorge Galemire, etc) y un reducido público seleccionado que generó un ambiente totalmente íntimo.
¿Qué elemento o situación disparó la composición de los temas?
Los temas fueron compuestos y seleccionados para este álbum por su conexión rítmica, quería, a diferencia de mis otros trabajos, volver a la raíz tanto del candombe y la música brasileña, sin obsesionarme con la producción, es decir, algo puro y orgánico, sin trucos ni trampas. Por ejemplo, hay una canción, Samambaia, que su nombre refiere a una flor mitológica conectada con el folclore brasileño, utilicé esa leyenda para homenajear a todos los músicos que me marcaron de Brasil, tanto Lenine, Chico Science, Pixinguinha, Toninho Horta, Milton Nascimento, entre muchos más. Por otro lado, Alma y sudor, otra de las canciones del disco, es un candombe clásico muy emparentado con el sonido de mi gran influencia uruguaya, Eduardo Mateo, que se fusiona con escalas hindúes y flamenco.
¿Qué caminos musicales transita el disco?
Es un disco muy variado a nivel rítmico y tímbrico ya que viaja entre diferentes estilos: candombe, samba, bossa nova, pop, jazz… creo que eso lo convierte en un trabajo sin las fronteras de las etiquetas.
¿Es un disco para escuchar dónde, en qué momento, con quién?
Creo que es un disco atemporal por ser tan desnudo y directo, es una buena manera de acercarse a mi música, sin los trucos de la producción que muchas veces no dejan apreciar realmente a un artista. Aquí no hay Autotune, la dinámica de los instrumentos se ha mantenido respetando la ejecución de cada canción.
Se puede escuchar en cualquier sitio, yo siempre recomiendo hacerlo con un equipo que permita apreciar los armónicos y los bajos auténticos. Hoy en día los celulares y otros dispositivos digitales anulan las frecuencias graves y realzan los agudos, siendo muy complicado disfrutar realmente de la pureza del sonido y su definición.
¿Cuáles son las tres canciones que más te gustan y por qué?
No tengo predilectas pero por elegir algunas simbólicas, Fronteras, que es la canción que cierra el disco, es importante porque unifica el concepto del álbum, dice una parte de su letra: “No existen mapas cuando ves los astros en el cielo, galaxias que se besan surcando el universo, abrazadas por el tiempo”.
Otro tema que gusta mucho es En Tiempo Real, que es un 6x8 y juega a modo de chacarera poli rítmica con una letra que habla de vivir el momento: “Una certeza es hoy, pero mañana no sé si es mejor”.
Por último, me gusta mucho Le Llaman tierra, que es una bossa nova que cuenta la historia de la creación de la vida en la tierra de forma amena: “Hace más de 4000 millones de años, pasó algo grande y por eso estoy aquí”.
¿Se te ocurre alguna anécdota sucedida durante el proceso de grabación?
En verdad el álbum estaba pensado para grabarse tanto en audio como en video, pero al final el resultado final de la grabación del video no fue el esperado y me decidí por quedarme con la música… realmente es lo que más me importa, por eso estoy más que satisfecho.
Después del concierto terminamos todos sumidos entre vinos y guitarras en pleno centro de Madrid y se unieron a la celebración músicos callejeros; realmente fue un momento memorable.
La última, ¿qué cosas creés que han cambiado en tu música?
Siempre he mantenido mi esencia, pero he ido mutando progresivamente en las ideas, en la forma de armonizar al componer. Cada día me siento más desnudo, más libre en las estructuras, en los tiempos, ya no necesito cargar la música, cuando más simple mejor; ese siempre va a ser el gran aprendizaje de la vida, la simpleza.
Data
Artista: Pablo Sciuto
Título: Fronteras
Sello: Hipnótica Records
Año: 2018
Arte: Mercedes Cubas Rodero y Estudio Ojo Binario.
Grabación: Ricardo Escassi del Castillo.
Producción: Pablo Sciuto
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