SieteNotas

Fernando Goicoechea, Música para cine

16/2/2000

Mucho sabemos lo difícil que es hacer cine en Uruguay pero poco de quiénes lo intentan. Es uno de ellos. Ha compuesto música para dos películas, Gardel, ecos del silencio y Cacería en Punta del Este (a estrenar), ambas del director Pablo Rodríguez. También ha participado en distintas bandas sonoras como instrumentista: Vida Rápida y Otario entre otras. Del sentido y significado del sonido y de los problemas e inconvenientes del cine uruguayo habla Fernando Goicoechea.

en Uruguay

Aunque es más un acercamiento primitivo, en realidad para medios audiovisuales se hace mucha música. Yo trabajé diez años haciendo jingles para televisión, que de alguna manera tiene algo que ver, porque muchas veces lo que tenés que hacer es ayudar a entender una situación que plantea el video. Y el tema es entender lo que pasa en una película. En un comercial de TV desarrollás un pequeño momento, en la película tenés que estructurar todo de tal manera que los elementos ayuden al espectador a percibir lo que el director está intentando plantear.

Yo creo que la música debe ayudar a los climas de cada escena pero tiene que estar estructurada de tal forma que dé llaves al espectador para vivir la historia completa. Llegado este punto es importante tener en cuenta siempre que la música es una parte del conjunto de elementos que construyen una película y pienso que una música es buena cuando en la estructura general el espectador llega a tener sensaciones sin percibirla como un elemento separado del resto. Hay varios autores que dicen que la música de cine es la música que escucha todo el mundo pero que no la escucha a la vez, es decir, no se da cuenta que está, pasa desapercibida a un nivel consciente primario.

de publicistas a cineastas

Brasil y Argentina tienen una tradición cinematográfica. En Uruguay no es lo mismo, existen los intentos. Ultimamente uno se puede dar cuenta, con las escuelas de cine y demás, que se está intentando tener formas o medios o gente que pueda utilizar ese lenguaje con cierta solvencia. Lo que queda si no, es ir a estudiar al exterior o, después de trabajar mucho tiempo en algún rubro publicitario, intentar hacer una película. Han habido varios, Ricagni , Ameglio, Arzuaga.

Lo que estaría bueno en el campo sonoro sería tener un mejor acceso al aprendisaje formal del asunto, tengo la sensación que por momentos hay directores o productores vinculados al cine nacional que no le dan a la música y al espacio sonoro un lugar tan importante como a otros elementos de los tantos que conforman una película. Hay gente que está intentando hacer doblajes para otros países. El espacio sonoro vinculado al cine no es un espacio tan investigado como otros en nuestro país. Hay gente que ha hecho música, pero no existe el medio y nadie vive de eso. En realidad todo lo asociado al cine, hasta este momento, tiene mucho del esfuerzo personal de alguien que quiere sacarse las ganas de hacer cine y vivir del cine, pero de hecho en Uruguay no se puede. El cine uruguayo está lleno de gente que cobra mucho menos o que no cobra nada y que pone mucho trabajo... pero bueno, lo que hay que hacer es idear una forma de volverlo rentable de alguna manera, porque nadie puede vivir haciendo esfuerzos personales que no tienen remuneración. Sin duda que a medida que pase el tiempo existirán más posibilidades. En otras épocas, de la breve historia cinematográfica del Uruguay, creo que era más difícil pues acceder a la tecnología que implicaba grabar una banda sonora era más costoso que actualmente.

contacto

Era un asunto de llegar al género por otro lado. Pablo Rodríguez quería una persona con una percepción no desde adentro del tango. Toco tango pero no soy una persona que haya nacido tocando tango, por eso me contactó. Así hice la música de su primer película Gardel, ecos del silencio, vinculada al tango, y también me llamó para hacer la música de su segunda película Cacería en Punta del Este. La música de ésta nueva película no está inscripta dentro del género tango. Aunque hay algún elemento como el bandoneón, hay otras formas como rock, músicas para un cuarteto de cuerdas y un cuarteto vocal, en la música de ésta película utilicé muy poco el sintetizador y me manejé con instrumentos reales más que con instrumentos sampleados.

dinámica

El tema interesante del cine es que, si bien el director es la cabeza, son varios los equipos que interactúan. Hay alguien que dice: "bueno, esto va acá y esto allá", viene el músico y propone una música para un lado: "esta me gusta, esta no, esta me parece que funcione, esta no", se discute y se ve, pero antes estuvo el fotógrafo que por más que tenía su guión puso el ojo... y eso ya construye el lenguaje. Lo que tiene interesante el cine es eso, es que la película hasta que no está terminada nunca está terminada. Es bien interesante y creo que está muy bueno trabajar en algo donde uno no tiene el control total.

El músico y el editor de sonido son los que reciben último la película. No tienen por qué participar del rodaje, porque el rodaje no es la película. A veces te dan un copión o te van dando escenas para que vayas trabajando o ya viste el guión, de repente, pero no es la película. El guión puede estar muy pensado, muy bien ordenado, pero el guión definitivo termina siendo lo que se seleccionó como edición de la película.

negociar

Hubo momentos en que él (Pablo Rodríguez) escuchaba determinadas cosas y tenía parámetros, y hubo otros en las que yo propuse y él estuvo de acuerdo. En realidad, mientras lo vas haciendo y lo vas escuchando vas viendo también en qué momento va cada cosa, cómo es. Tiene una mezcla de todo, también ahí tenés que negociar. Negociar significa de que cada uno está convencido de lo que pretende, y en la medida en que en una escena se plantea una cosa distinta, ir buscando los elementos que permitan primero, no salirte de la estética que tenías propuesto musicalmente y a su vez dar la idea de lo que se propone. En realidad, dar la sensación, porque no es una idea, es una sensación. Hay una cantidad de elementos musicales asociados al lenguaje cinematográfico que puestos en determinadas escenas el espectador los reconoce como elementos auditivos asociados al clima de la escena. Por ejemplo: cuerdas en momentos de tristeza o de angustia, éstos elementos el espectador los reconoce pues son parte de su cultura musical asociada a ese tipo de escenas. Con algunas de las músicas de esta nueva película hice la prueba de que las escucharan algunas personas, y les pedí que se imaginaran la escena, la mayoría se imaginó correctamente los climas de las escenas sin haberlas visto y sin conocer el guión. Un ejercicio muy interesante es ver películas o partes de películas con distintas músicas. Uno percibe elementos de la imagen o reafirma elementos de la imagen bastante distintos. Si vos ves, por ejemplo, a una persona que va corriendo por una calle y tiene una música con mucha tensión, uno puede pensar que está escapando de algo; ahora, si tiene una música de cuerdas y muy dulzona, de alguna manera, uno piensa que se va a encontrar con alguien o algo que aprecia.

Esa misma imagen puede implicar, de acuerdo a la música que pongas, dos ideas bastante contrapuestas, una idea de escape y otra de encuentro. Entonces, a mí me parece que es muy interesante en un mundo audiovisual como en el que vivimos, el poder analizar ese momento. Analizar los elementos vinculados al sonido que ayudan a construir un lenguaje que permite comunicar cosas tan distintas.

adaptarse

Muchas veces los cambios en la edición hacen que músicas que funcionaban ya no funcionen, y ahí tenés que volver a trabajar. El cambio en la edición implica muchas veces un cambio de sentido, al cual por supuesto debe vincularse la música.

Es bien interesante ver que todos los que están vinculados a una película tienen que tener una buena capacidad de adaptación, de cambio, de asumir el cambio sin que el cambio se vuelva un hecho negativo en sí mismo. Lo que tiene que estar bien es lo que yo voy a ver, y a oir, si lo tengo que grabar devuelta, lo tengo que grabar devuelta.

Gardel, ecos del silencio

Guión y dirección:
Pablo Rodríguez

Música original:
Fernando Goicoechea

Músicos :
Gustavo Nocetti - voz
Malena Muyala - voz
Néstor Vaz - bandoneón
Cono Castro - contrabajo
Lucrecia Basaldúa - cello
Ney Peraza - guitarra
Fredy Perez - guitarra
Fernando Goicoechea - piano
Jhonny Roldán -guitarra
Sonorización: Jorge Rodríguez Mesías
Formato: 35 mm. Duración: 80 minutos.
Grupo Tango´s Uruguay

Caceria "Punta del Este"

Dirección:
Pablo Rodríguez

Música Original:
Fernando Goicoechea

Músicos:
Malena Muyala - Voz
La Otra - Cuarteto Vocal
Cuarteto de Cuerdas
Guzmán Peralta - Guitarras eléctricas
Nicolas Correa - Percusión , Batería y Programación
Edgardo Rigaud- Guitarras
Pollo Píriz - Bajo
Gabriel Casacuberta- Bajo
Néstor Vaz - Bandoneón
Cono Castro - Contrabajo
Fernando Goicoechea - Teclados y Programación

BUEMONT films & Grupo Tango´s Uruguay

Carlos Bassi

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