Cadáveres Ilustres -una de las bandas más representativas del rock nacional de los ochenta- volvió a los escenarios después de una prolongada ausencia.
La cita era en la Sala Zitarrosa, dentro del marco de recitales que organiza X FM.
La expectativa era grande, y el público cumplió con creces, ya que la sala estaba prácticamente llena.
La banda ahora es un cuarteto, ya que Marcelo Fernández desde hace un tiempo es guitarrista de Buenos Muchachos.
Con una muy buena puesta en escena que incluyó una excelente iluminación y un muy correcto sonido, subieron los Cadáveres al escenario. El rock callejero con influencias del sonido neoyorquino de los ’70 siempre fue el fuerte del grupo, y en esta vuelta no se olvidaron de esas raíces: temas viejos como “Pedro” o el clásico “Mala fama” sonaron muy potentes.
Hubo tiempo también para tocar algunas canciones nuevas, entre las que se destacó la muy oscura y climática “Animal”, muy bien recibida por el público.
Sobresalió también la versión de “Buscaré” -un gran tema del disco “Mala fama”- tocada en forma casi acústica.
Subieron al escenario músicos invitados en diferentes tramos del espectáculo, Wilson Negreira en percusión y más tarde Marcelo Fernández en guitarra reuniéndose con sus ex compañeros para tocar los últimos temas del show con mucha fuerza.
Cerrando el espectáculo sonó el esperado “Quiero salir de aquí”, un clásico coreado por casi toda la gente en la sala. Después hicieron una versión enganchada de dos verdaderos clásicos del rock and roll de todos los tiempos: “Louie Louie” enganchada con “Wild Thing”.
Hubo in bis, que fue “Hijos de la calle”, con un interesante duelo de violas entre los hermanos Fernández, como para terminar el show con mucha energía. En definitiva, la vuelta de Cadáveres Ilustres tuvo una buena bienvenida, son una banda de rock experimentada y con un sonido potente y característico que merece ser escuchada por el público más joven que la banda no captó durante su ausencia de las tablas locales.
Javier Bermúdez