el rock de Tajo

Desde la pantalla gigante ubicada al fondo del escenario, el Dr. Shjheyrpfxdsko -o cómo se llame- nos comenta, en su extraño idioma, que debido a una importante huelga de taxistas, los bomberos pegaron el golpe de estado en Tajo. Aunque muchos se fueron de esta ciudad, él se puso una carnicería y se quedó; siempre adoptando una posición “cocucu” (tres veces en contra y una última a favor).

Pero no dijo lo más importante: el rock nacional nació en Tajo. Sólo de esta manera se puede explicar que los muy diferentes estilos de los invitados del pasado 14 de abril en el Plaza, encajaran perfectamente con las canciones del principal grupo de rock de esta ciudad: El Cuarteto de Nos.

Tabaré Rivero fue la primera “estrella invitada” para que, vestido de gaucho, reviviera los tiempos del “teatro-clips”: épocas en que el El Cuarteto y el actor-cantante se adelantaban a MTV.

“Siempre Que Escucho El Cuarteto” quedó perfecta en la voz de la muñeca de Dani Umpi; la letra de “Me Amo” sin duda fue hecha para que la cantara Emiliano Brancciari y la imagen de Astroboy resultó ideal para “No Somos Latinos”.

Las guitarras de Bob y Leo Sónico (“Se dice por ahí que si los Supersónicos cantaran serían tan buenos como El Cuarteto y que si El Cuarteto solamente tocara, sería peor que los Supersónicos”) brillaron adecuadamente en “Soy Un Capón”; mientras que Gabriel Peluffo le dio más aire estómago a “Andamio Pijuan”, y el quinto Cuarteto: Juan Campodónico (productor del último disco del grupo), se calzó la guitarra y le sacó todo el jugo posible al “Oriental Desertor”.

Un capítulo aparte merece la reunión, por primera vez desde la separación de Peyote Asesino, de Campódonico y L.Mental para interpretar “Al Cielo No”: uno de los momentos más festejados por el público.

Para el cierre, dos bisses: el primero se lo robó enteramente Alvin, que por un momento dejó de estar siempre sólo, siempre atrás; y el segundo lo marcó “Bo’Cartero” cantada por todos: Cuarteto, “estrellas invitadas” y público.

En el final nuevamente la pantalla gigante, pero esta vez mostraba a Ricky confesando al psicólogo Santiago su predilección por hacerle “el amor nasal al ternero macho”.    

Con elegantes trajes negros, El Cuarteto festejó su cumpleaños número 21 en un concierto perfecto desde todo punto de vista: buen sonido, gran despliegue visual (la pantalla apoyaba con imágenes la mayoría de las canciones), constante humor cuartetero, y formidables interpretaciones de sus temas (detalle no menor, ya que entre tantas virtudes uno pierde de vista lo más importante: Roberto Musso, Ricky Musso, Santiago Tavella y Álvaro Pintos son, además, muy buenos músicos).

Repasando viejas canciones, haciendo nuevas versiones y estrenando tres temas, El Cuarteto recordó viejos tiempos (y no tan viejos) e hizo historia.

Al comienzo del espectáculo, cuando terminaban de tocar “Canción de Amor”, Roberto Musso se presentó diciendo: “Nosotros somos el Cuarteto de Nos y en estos 21 años no hemos encontrado nada mejor que hacer”. Esperemos que nunca lo encuentren.

Nicolás Hidalgo