Pablo Traberzo hace blues, siente el blues. Grabó un disco hace algunos meses que está próximo a editarse y estuvo tocando en España junto al "Flaco" Barral. Nos parecieron motivos más que interesantes para charlar con él y tener una versión de primera mano sobre la actualidad del blues en Uruguay.

¿Existe un "ambiente" de blues uruguayo?

Mirá, hay gente que toca y hay gente que le gusta, a veces por culpa del músico en cierta forma y por culpa del medio que lleva a que el músico se comporte de cierta forma hay una falta de respeto en cuanto al producto que se lleva a cabo, al producto que se presenta en un show, en un recital o lo que sea, falta de respeto me refiero a la falta de criterio en cuanto a decir "bueno, yo voy a presentar un material, tiene que estar presentado con cierta seriedad y respeto hacia la gente que está abajo". Desde el momento en que vos partís mal, ya sea sin ensayos o sin la instrumentación adecuada, o sin la prueba de sonido necesaria, o miles de factores que influyen para que el concierto sea bueno, si empezamos mal, la gente, la que está abajo, va a recibir malas vibraciones o un mal show y eso después repercute en que las salas estén vacías o que los boliches cuando hay artistas de blues o artistas en general estén vacíos. Entonces yo creo que en la medida en que el artista se preocupe en lograr un producto fino, el público o la demanda va a ser mayor. En el caso especificamente del blues en este momento no sé, pero creo que si hay tres o cuatro bandas por ahí sonando es mucho. No sé, con los que estamos trabajando por ejemplo son la gente de Alive, Daniel Fráppola y Alive, que hemos estado haciendo recitales homenajeando a Hendrix y a Vaughan, se que ellos están trabajando, y después como banda La Camorra y ... no sé si hay alguien más, en este momento no sé si hay alguien más trabajando con respecto al blues. Pero gente hay, el asunto es hacer una buena campaña "publicitaria" y generar la necesidad ¿no?

¿Puede haber musicalmente una manera uruguaya de hacer blues?, ¿o el blues es del norte y no se le pueden sumar "piques" nuestros?

Yo creo que sería imposible escaparnos de nuestro uruguayismo, digo, nacimos acá, aparte partí de la base que en un principio las letras de blues eran cantos de dolor que practicaban los negros en los plantíos de algodón, o sea, nosotros no podemos estar cantando eso, en mi caso personal hablo de las cosas que me pasan diariamente. Generalmente el lenguaje de blues es un lenguaje simple, o sea, no puede ser de otra forma porque vos no podés poner palabras muy complejas en un blues porque no tendría sentido, es como hacer un tango y ponerle palabras sumamente complejas. Hay mucha similitud entre el tango y el blues.

La música te pide esas letras

Si, es que es así, es simplismo ¿no?

Es más directo

Claro, simplismo y ataque, tiene que ser directa la letra, de fácil comprensión a primer oído. En nuestro caso ya te digo, no hay fantasma, no hay entrelíneas, así que cuando escuchás las letras es eso, no hay cosas más allá.

Somos uruguayos, hablamos de una forma y por más que se nos ocurra hacer "otra cosa" vamos a hacer una vaga copia, una sencilla copia, y mala. Entonces lo mejor que podemos hacer en cualquier aspecto de nuestras vidas es ser nosotros mismos, que es lo mejor que sabemos hacer. Cuando nos ponemos a inventar y emular formas de ser, formas de vivr, formas de componer, ya está, perdimos la identidad. A mí personalmente con esta forma de componer, con esta forma de hacer música, con esta forma de letras, por ejemplo estuve en España y me fue muy bien. No quiere decir que lo que yo esté haciendo sea excelente, pero pienso que el camino que elegí está bien, porque la gente allá respondió bárbaro y sin tener una forma de ver las cosas como tienen ellos, quizá por eso mismo les resultó pintoresco, no sé, novedoso. Por ejemplo tenemos un tema que se llama Mi viola, mi viola quiere decir "mi guitarra" ¿no?, pero los tipos no entendían, no saben lo que es "mi viola", entonces todo el mundo estaba "¿qué es mi viola?, ¿qué es viola?", entonces tenés que explicarle y se dan situaciones muy pintorescas, está bueno.

¿Cómo se hace para sentir esa música tan cerca y estar tan lejos geográficamente de las raíces?. Tal vez esa distancia influya de alguna manera...

Es como... cómo te podré explicar, como una cuestión de un creyente con Dios ¿no?, lo veo de esa forma. Es una cosa que nunca por más que yo me lo proponga voy a poder acceder a ser; yo nunca voy a poder sentir el blues de la misma forma que lo siente un negro, ¿por qué?, porque yo nací en un lugar y tengo una forma y una concepción de la vida que no es igual a la concepción de la vida que puede tener un negro en Estados Unidos en el Missisipi, o alguien en Texas o lo que sea. Entonces mi forma de ver el blues va a ser siempre "mi" forma de verlo, como puede ser "mi" forma de creer en Dios. Yo no puedo creer en Dios de la misma forma que creés vos, porque tu concepción de vida, tu concepción de Dios es una, y la mía podría ser otra; en mi caso no creo en Dios, pero suponiendo que fuera creyente creo que lo podría comparar de esa forma. Y la única forma que le veo para poder acceder a las raíces es con laburo, que si hay algo que yo me considero es un buen laburante. Jamás me considero un buen músico, ni un buen cantante, ni buen compositor; sí me considero un buen laburante, trato de estar informado al máximo, siempre consiguiendo libros, leyendo acerca del sonido, sobre qué equipo con qué guitarra con qué cuerdas, con qué micrófonos... para qué y cómo ¿no?.

Aquello de que el noventa por ciento es trabajo y el diez por ciento es...

Sí, suerte. Es eso. Ya te digo, lo de la suerte para mí es un factor fundamental. Porque hay que estar en el momento justo a la hora justa en el lugar justo, entonces podés ser un muy buen laburante, un excelente músico y no estuviste en el lugar justo, te perdiste el ómnibus y la quedaste ¿viste?. Entonces yo creo que el factor suerte es fundamental en esto.

Vos hablabas de lo de España. Jorge Barral habló maravillas de tu paso por España, llegaste a hacer veintisiete toques en veintiocho días, ¿cómo fue eso?

Primero que nada lo que quiero destacar, me interesa que se sepa, es lo que es el Flaco Barral en España. El Flaco Barral es un pilar de la movida del blues en Madrid. Cuando te digo pilar es que le preguntás a cualquier persona que entienda de blues en Madrid "¿qué es lo mejor que podés escuchar acá?", y que lo primero que te digan sea al Flaco Barral entre dos o tres cosas más. O sea, es algo sumamente importante que nosotros acá los uruguayos no lo visualizamos porque de repente lo damos por sobreentendido o porque al haberse ido hace tanto tiempo como que perdemos cierta pertenencia, y creo que al contrario, tenemos que sentirnos orgullosos de tener a alguien que se fue hace tanto tiempo y que ha logrado tanto como logró él allá. Eso como primera cosa. Segunda cosa en cuanto a lo que te hablaba hoy de la suerte ¿no?, yo tuve la oportunidad de ir a España gracias a que un día en 1998 se estaban presentando bandas para lo que era el Montevideo Blues Festival, y nos tocó concursar. Fuimos y justamente ese día cayó el Flaco Barral, nos vió tocar y me acuerdo que se me acercó y me dijo "que bueno, ¿te gustaría ir a España a tocar?", y yo le dije "sí, me gustaría", y bueno, mail de por medio empezamos a comunicarnos y cuando me quise acordar me mandó el pasaje para irme para allá, una cuestión ya te digo, de suerte. Porque podría haber tocado bárbaro ese día pero si él no estaba ahí no salía esto de ir a España. Por otro lado se movió y sigue moviendo cielo y tierra para abrirme a mí un camino allá, una cosa que yo le voy a estar agradecido siempre y que no sé como le voy a poder pagar.

Bueno, por suerte fuimos para España, estuvimos tocando allá en un trío; fui dos veces, estuvimos tocando la primera vez con él en el bajo y José Manuel en la batería, un español que vino con él para tocar en el Fetival de Blues, y la segunda vez con él en bajo y un alemán, Falker, en la batería, siempre en trío y recorriendo todo Madrid.

¿Quedó alguna puerta abierta allá?, más allá del Flaco, que está ahí...?

Sí, sí, pila de gente. Toda la gente con la que hemos estado ahí ha sido excelente. Me gustaría mencionar a esa gente para que se sepa que se está hablando de ellos en un lugar tan lejano como Uruguay ¿no?, por ejemplo Ozzy Martínez es un armonicista excelente con el cual estuvimos tocando, a mi forma de ver uno de los mejores de Madrid. Después otro referente en cuanto al blues es Tonky, que ha sido guitarrista de Mick Taylor por decirte algo, una excelente persona y un excelente músico. José Manuel en la batería, excelente músico y amigo también; Fede Aguado, otro guitarrista muy bueno, y mucha gente, todo el mundo abriéndome las puertas para decirme "cuando quieras venite, te quedás en casa, te queremos acá, tocando". Y bueno, es gente que te deja algo grabado en el corazón, es difícil olvidarlo.

¿Y qué hacés acá?

Lo que pasa es que uno... están los afectos ¿no?, no es tan fácil, uno tiene su familia, sus amigos, yo creo que hay cosas que no se comparan con el dinero. En mi caso quizá no es tanto el dinero lo que me llevaría a irme para allá sino la posibilidad de estar haciendo lo mío que es la música. No me importa el dinero en realidad más allá de lo suficiente para existir.

Ahora estamos viendo la posibilidad de volver para España, no sé si a fin de año o a principios de año, pero todo esto está todavía medio verde, estamos esperando a ver qué pasa. Me gustaría también agradecer desde aquí a alguien que permitió mi ida allá, porque no solo fue movimiento del Flaco sino que hay una productora allá que se llama Raíces y Ritmo que es importante mencionarlo porque fue quien puso el dinero para llevarme la primera vez a ciegas porque no me conocían. El Flaco fue, habló y me recomendó tan bien que bueno, Paco, que es el dueño de esa productora, apostó a mí sin saber quien era, y pagó los billetes de avión sin saber a quién se llevaba. Y me llevó la segunda vez y bueno, estamos en tratativas para ver si podemos ir una tercera vez, así que a Paco de Raíces y Ritmo también estoy muy agradecido.

Ahora estás con todo el tema del disco tuyo, que ya está grabado y hay que hacerle la masterización, ¿le vas a hacer algún otro "retoque"?

No, no. Vamos a apuntar a la frescura del disco, está como salió del estudio, lo vamos a masterizar y listo, largarlo. También está en España el disco y probablemente allá se haga con una edición distinta porque vamos a hacer los temas del disco más unos temas que grabamos la primera vez que fui a Eapaña con el Flaco Barral, grabamos unos temas en estudio y probablemente un par de ellos estén en la edición española y no en la edición que salga acá.

Vos me decías que en el disco están grabadas las bases en "toma uno"...

Prácticamente, no fueron todos los temas, pero la gran mayoría de los temas fueron "toma uno"; y bajo, batería y guitarra tocando a la vez. Después le agregué las voces y las guitarras de solo. También es un disco que prácticamente no tiene efectos, o sea, las guitarras son naturales, todo es natural, no hay efecto ninguno. No hay procesadores, no hay nada, tratamos de encontrar un sonido fresco y no "modernoso", hay mucha cosa "modernosa" sonando y yo creo que era demasiada gente haciendo lo mismo ¿no?, entonces bueno, vamos a buscar otra cosa, vamos a tratar de sonar como se sonaba antes y tratar de hacerlo bien. Quedamos bastante conformes, a pesar de que ya te digo, es un disco contrareloj...

Pero tiene un sonido auténtico. Capaz que por eso mismo también, por el tema de la frescura y por haberlo grabado así...

Bueno, me alegro que lo hayas percibido así, en parte nuestra intención era eso, no era mostrar un sonido demoledor, no era la idea de hacer un disco que lo pusieras y se te cayeran las ventanas, no, sino un disco que tuviera un sonido fresco, que te fuera fácil de digerir a primera vista, ya te digo, tratamos de que todo sea digerible a primer oído y a primera vista, es eso, te gusta o no te gusta, es tan simple como eso. Porque hay muchas cosas muy elaboradas y hay mucha gente haciendo cosas muy elaboradas, que está bien, es una forma de conseguirlo, pero nosotros apostamos a que a veces la belleza está en las cosas más simples.

Viviana Scirgalea