la vuelta al barrio

Ustedes ya saben: La Vela estuvo girando gran parte de este año por Europa, así que el concierto del pasado 8 de noviembre en el Velódromo fue el reencuentro con su (cada vez más joven) público. Aunque no se llenó, bastó que la gente colmara en su totalidad la cancha del recinto para que nuevamente se produjera la fiesta que ya es costumbre en cada toque velero. Fiesta que, además de las ya clásicas banderas, bengalas y cánticos futboleros, tuvo como invitados a dos grupos que llegaron desde el interior del país: El Tábano Gerardo de Florida y Graffolitas de Durazno.

Un poco de reggae, un poco de punk y mucho de ska es lo que mostró El Tábano Gerardo, el encargado de abrir el show. Luego Graffolitas demostró que cada vez son más los que se suman a su punk de protesta, y hasta se dieron tiempo para realizar "Johnny": el clásico tema de La Polla Records (cover que La Vela también hacía en sus comienzos).

Pasados unos minutos de las diez de la noche y después que un pálido personaje le diera de comer a su muñeca sentado en una escalera sobre el escenario, apareció La Vela Puerca para despacharse con dos horas y pico de canciones. Allí se escucharon desde los clásicos temas de "Deskarado" ("El bandido salto de mata", "Vuelan palos", "Madre resistencia", "Paren hoy", "Mi semilla") y "De bichos y flores" ("Potosí", "El ojo moro", "El Huracán", "Por la ciudad", "Contradecir") hasta los (¿clásicos?) temas que todavía no grabaron oficialmente pero que ya el público velero conoce ("Zafar", "Hay que ver", "Cállate por favor") e incluso dos temas nuevos.

También hubo invitados para cantar algunos temas: el primero fue Pablo Silvera de Once Tiros, luego Ozzy Garbuyo de Bufón subió para "Colabore para no desaparecer" y Juan Berbejilio, el legendario cantante de La Chancha Francisca, hizo lo suyo con "El profeta". "José Sabía" nuevamente fue cantado entre Sebastián Teysera, Alejandro Balbis y todo el público, y "El viejo" volvió a sonar después de un tiempo considerable de no tocarla en vivo por estos lados.

Rodeados de amigos arriba y abajo del escenario y mostrando casi todo su repertorio musical, La Vela Puerca volvió al barrio después de un año que marcó su debut en el viejo continente y el principio de su consagración internacional. Bienvenidos a casa.

Nicolás Hidalgo